viernes, 30 de diciembre de 2011

2011+1

365 días que se han pasado tan rápido como pasan las hojas de esa novela que tanto te ha enganchado.
Días de mucho y de nada, de emociones y sensaciones, de momentos e imágenes, de conversaciones y silencios, de cocina y pasteleria, de verano e invierno, de cafes y fiesta, de compras y paseos, de cotilleos y chismes, de alegrias y penas, de problemas y soluciones, de principios y finales, de vosotros y yo.
Un año que puesto en la balanza da un resultado positivo, a pesar de lo malo, a pesar de las pérdidas. Año del que no cambiaría nada, porque todo lo que ha pasado me ha llevado a ser como soy, a evolucionar e ir tallando mi persona hasta conseguir ser alguien a quien respeto. Termino el año con una sonrisa, con ganas de empezar 2012 y ver qué me deparará.
Porque para mejorar a este año va a necesitar mucho, 2011 no se lo ha puesto nada fácil y espero que esté a la altura y lo supere ya que si no es así, sería un paso atrás; paso que por nada del mundo estoy dispuesta a dar. Mi vida me espera y todo pasa porque cada año sea mejor que el anterior y el 2012 me parece un gran año para comenzar el resto de mi vida.
Que han sido tantas cosas buenas y mejoras en mi vida que ya casi no puedo pedir más. ¿Quién puede pedir más teniendo todo lo que tengo en mi vida?
Tengo a mi familia, esa que está siempre aquí conmigo y me aguanta en mis peores momentos; mi madre y mi padre que son lo mejor que me ha pasado en esta vida, todo lo que tengo es gracias a ellos y a lo que han luchado por hacer de mí lo que soy ahora. Van a mi lado en cada paso que doy y aunque a veces no los vea, siempre están y estarán, porque no siento más orgullo por nadie que no sean ellos dos.
Tengo a mis amigos, pero no a esos que dicen conocerme, no. A mis amigos, que aunque no lo digan muy a menudo, son de esos de verdad, de lo bueno y lo malo, de las alegrías y las penas, de esos que escriben la historia de mi vida en mayúsculas. Convierten cada segundo que comparten conmigo en algo especial, grabando cada recuerdo en mi memoria y apropiándose cada vez de un trocito más grande de mí. Algunos de esos se han ido pero el tiempo que hemos compartido camino siempre lo guardaré como lo que es, un tesoro a pesar de todo. Pero otros siguen aquí, a mi vera, aguantándome a cambio de nada porque ni las gracias aceptan. Los conservo a pesar de todo, a pesar de mí y a pesar de las circunstancias, y así quiero seguir, con ellos en mi vida, porque teniéndolos no dudo que 2012 será mejor. Son todo aquello que una persona necesita para levantarse y sonreír, para caerse y no rendirse, para llorar y secarse las lágrimas...Para vivir y disfrutar.

Gracias 2011 por todo lo que me has dado y lo que me has enseñado
Gracias a vosotros, papá y mamá por no dejar nunca de estar ahí dándome todo el cariño que tenéis y más
Gracias a vosotros, David, Claudia, Juanjo, Vane, Tamara, Ber, Dani, Raky, María, Marta, Patry, Patri, Laura, porque sin vosotros, nada hubiera sido igual.





jueves, 8 de diciembre de 2011

Qué tiene tu veneno, que me quita la vida...

Son temporadas... Épocas del año en las que como en otoño se caen las hojas, la inspiración se va de vacaciones y escribir se vuelve algo imposible.
Me encuentro en ese otoño de la inspiración, en el invierno de la escritura, a la espera de que las tardes se hagan más largas y la primavera de mis ideas empiece a florecer en mi cerebro y que el verano cálido alcance mis dedos para que se bañen entre teclas de la playa de la prosa.
Aún enciendo el ordenador, abro mi pequeño espacio de creación y espero que las palabras corran por mis dedos, pero tanto tiempo después ya me he resignado.
Es por ello que, hasta que esa desconocida que es ahora para mí la inspiración vuelva, he decidido crear entradas diferentes. Aquí voy a ir dejando estrofas o frases de canciones que, ahora mismo, es en lo que me aíslo para no salir de mi mundo. Os abriré ese pequeño hueco que queda en mi que está repleto de la música que le da un poco más de sentido a toda la vorágine en la que vivo; os enseñaré el lugar en el que me pierdo y del que no quiero salir. A pesar de todo, aquí dentro puedo respirar...





Hay demasiados 
corazones sin consuelo 
es demasiado frío este momento 
cuando siento que te pierdo...

Amaral. Perdóname



Deja que la lluvia acaricie tus párpados,
que la humedad se clave en tu piel, 
deja que tus pies anden descalzos, 
no los pares si empiezan a correr...

Estopa. Hemicraneal




Let it be...

martes, 18 de octubre de 2011

Todo estará a tu alcance...Cree en ti.

De acuerdo, en la vida no todo es perfecto, pero por mucho que nos enfademos no dejará de ser así. Hay épocas malas y buenas, días brillantes y oscuros, momentos increíbles y momentos para olvidar, es la gracia de este juego que nos ha tocado.
Mirar hacia el futuro, ver más allá y creer que en todo se puede mejorar y que, efectivamente, así será. ¿De qué sirve deprimirse y dejarse ganar por ese ente que muchos denominan destino? Es muy fácil enmascararse detrás de él y echarle la culpa de lo que te pase, rendirte y dejar al mundo girar a su antojo. Entiendo que las fuerzas te flaqueen, que hayas tenido muchos reveses y que te parezca que todo está en tu contra pero me niego a que te dejes vencer y te acomodes a ver la vida pasar por delante de tus ojos. Convierte cada obstáculo en una oportunidad y no desaproveches cada situación que se te presente porque puede ser esa que te cambie todo.
Cree en ti, nunca dejes que nadie te haga dudar de lo mucho que vales porque seguramente sean ellos los que por su mediocridad no sepan valorarte como te mereces. Y sí, te doy permiso para que un día estés mal, que cojas la almohada y  llores, que grites y te enfades contigo mismo, pero sólo te pido que cuando termine el día te acuestes, respires hondo y te jures que mañana será un día diferente. Porque eres tú quien controlas tu vida, eres tú quien pone los límites, quien puede llegar al cielo o quien se puede quedar a ras de suelo. Tú y solamente tú puedes hacer de ti lo que quieres ser, lo que en el fondo eres pero no dejas que se vea. Surge, crece e impresiona a todos, pero sobre todo, a ti mismo, convéncete de lo valioso que eres y de que eso que aportas a cada vida que tocas es único e inigualable.






You just gotta ignite, the light, and let it shine
Just own the night like the 4th of July
'Cause baby you're a firework
Come on, show 'em what you're worth
Make 'em go as you shoot across the sky

domingo, 11 de septiembre de 2011

Me miro al espejo y la que esta ahí soy yo misma.

Te levantas por la mañana, te duchas y llegas al armario, lo abres y empiezas a buscar ropa. Camisas, jerseys, camisetas, vestidos, vaqueros... No sabes qué ponerte y empiezas a pensar y a probarte cosas. Y, ¿en qué te paras a pensar? En si te verán guapa, si es lo más apropiado para tu trabajo, en si hará frío o calor, lloverá o nevará, en quien te podrá ver y lo que pensará si te ve.
Son buenos argumentos para elegir la ropa que te vas a poner, tan buenos que se nos olvida el mejor, más simple y creo que de más autoridad que todos los anteriores y más que se os puedan ocurrir; nosotros mismos.
Mirarse al espejo y verse guapa es la mejor forma de empezar el día. Y verse guapa porque sí, porque te has arreglado, has elegido lo que te ha apetecido y todo pensando en ti misma.
En esta sociedad hemos cambiado los valores de sitio y me da la sensación que eso es el principio de muchos problemas actuales. Nos hemos vuelto egoístas pero a la vez también hemos dejado de pensar en nosotros mismos.
Egoístas en el sentido de que para subir, escalar, somos capaces de pisar a compañeros, de triquiñuelas y hacemos oídos sordos a problemas y a situaciones. Creemos que por mantenernos al margen todo desaparecerá y simplemente nos limitamos a seguir como un rebaño de ovejas y a ocupar nuestro cerebro con actividades que sólo atrofian más a nuestro cerebro.
Desde otro punto de vista nos hemos vuelto seres demasiado sociales, hemos llegado a dejar que la opinión pública nos elija los caminos que debemos tomar y las cosas que debemos hacer porque si no fuera así nos someteríamos a una especie de juicio propio de otras épocas en las que por no ser católico te mandaban a la hoguera.
Viendo como la gente encauza sus vidas sin personalidad, sin ilusiones propias yo quiero ser una voz discordante. Una voz que siga su propia vida y deje su propia estela sin influencias externas. Ser yo la primera en mi vida, en la primera que piense y en mi gente, esa que está ahí siempre, los de verdad que siempre ayudan y apoyan. Vivir mis días con sus noches haciendo a cada segundo lo que yo misma me dicto y no lo que esta sociedad basura que hemos creado entre todos cree mejor para mí. Porque de lo que estoy segura es que esa sociedad conoce tan poco de mí que lo que propondría hacer con mi vida tendría una diferencia de 180º respecto a la realidad, a mi verdad.




Tengo mucha vida y este don de gentes
creo en mi misma, no es cuestión de suerte. 
Tengo otro concepto de comerme el mundo. 
Amor, como yo no hay dos.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Y deberás crecer sabiendo reir y llorar...

He crecido. Definitivamente muchas cosas las he dejado atrás porque mi mente continúa con la vista hacia delante dejando fuera de su alcance todo lo que no aporta nada a mi vida.
La madurez no es algo obligado, que tenga una fecha de comienzo y mucho menos un botón que cuando alguien lo aprieta de repente lo sea.
Durante mucho tiempo he creído ser madura y no dudo que lo haya sido, pero no del todo, muchas cosas que para mi eran importantes y necesario tener en cuenta resulta que ahora las veo simples, vacuas.
No sé en qué momento fue ni cómo pasó; sólo sé que empecé a cambiar mi forma de pensar, a ver las cosas desde otra perspectiva y a valorar los problemas y las alegrías en su justa medida. Y así todo parece más fácil, no te agobias tanto y todos los problemas tienen una solución al alcance de tu mano, cerca o lejos, pero la hay.
Los problemas no desaparecerán, las alegrías no estarán presentes cada día, las fuerzas flaquearán, pero ahora más que nunca siento una paz dentro de mí que me anima a seguir hacia delante, sin apartar la vista del horizonte, manteniendo lo positivo, desechando lo negativo y construyendo mi vida en sólidos pilares. Pilares que, a pesar de derrumbarse en ocasiones, ahora son fuertes y firmes, tanto como mi voluntad a perseverar y crecer, escalar y mantenerme en la cumbre viendo las maravillosas vistas que desde allí se me van a ofrecer.




A veces sueño, vuelo libre como el viento, 
brillo como las estrellas, libre como el pensamiento


La edad no sirve de nada sin la madurez pero la niñez siempre nos acompaña.

martes, 26 de julio de 2011

Elegir...

Sí o no, a veces una decisión tan fácil consigue complicarte la vida demasiado. Elegir entre una cosa u otra, entre un sentimiento u otro, entre hacer esto o aquello no siempre es sencillo ni rápido, necesitas tiempo y organizar bien tus ideas para no equivocarte.
Elegir conlleva sopesar los pros y los contras, pensar en perder un poco para ganar un mucho y en saber que si te equivocas quizá no haya vuelta atrás. Pero, ¿quién sabe cual es el camino correcto y cual el erróneo? Eso es lo que se llama riesgo, y lo corremos más o menos pero siempre a cualquier hora de nuestro día. Con cada decisión asumimos que nos podemos equivocar y continuamos hacia delante. Decidido, ya no podemos volver atrás, ahora sólo queda ver si hemos acertado o no. Si hemos acertado, bien, seguimos nuestro camino sin saber que nos deparará; si por el contrario, hemos errado en la decisión puede que no conlleve consecuencias, pero si la disyuntiva era sobre un tema importante quizá llegue a marcar una muesca en nuestra alma. Y es que ¿qué hacer cuando has tomado la decisión errónea? Yo opino que lo mejor es aprender de ello e intentar no volver a hacerlo, porque volver atrás puede ser demasiado doloroso o imposible. De toda mala experiencia o decisión se puede aprender y aunque no haya vuelta atrás, te servirá para no volver a cometer el mismo error.
La vida son decisiones, meditadas o rápidas, instintivas o reflexivas, pero inaplazables en el tiempo. La vida es un continuo devenir de situaciones que no sabemos a dónde nos pueden llevar pero que seguro, nos entusiasmará andar ese camino.


La madurez no se refleja en el tomar decisiones acertadas, sino en vivir con las ya tomadas aun y cuando no sean acertadas.






Decidí prender a hacerme yo la maleta para poder vivir.

jueves, 14 de julio de 2011

Elvisa! :)

Algún día se anunciará que algo pequeño albergará grandes cosas. Una isla se creará y muchos problemas desaparecerán. Puede haber esperanza si queremos. Yo quiero




Hoy va por ella, porque aporta un rayito de luz con cada tutorial, porque su forma de ver la vida nos hace reflexionar de que a veces damos demasiada importancia a cosas que no las tienen y nos acerca un poco más a la realidad.
Gracias por toda tu creatividad.


Aquí os dejo el enlace de su blog, ¡merece la pena! 


http://elvisayomastercard.blogspot.com/

miércoles, 13 de julio de 2011

Ver el lado positivo, quizá lo mejor esté más allá de ti

Perder o ganar es cuestión de quien lo mire. He perdido y he ganado muchas veces en mi vida y quizá con más resultados negativos que positivos pero sé que cada derrota o victoria marcan algo en nuestra vida que nunca se borrará y siempre nos servirá en algún momento.
Hoy he perdido, me han obligado a ir dejando atrás una serie de sentimientos que me daban calor, felicidad y dolor de vez en cuando. Pero también he ganado, porque ahora sé que lo puedo dejar atrás y seguir, lo que antes aparecía difuso ante mis ojos se ha aclarado y ya sé a que atenerme. 
Nuestros caminos evolucionan paralelos pero no juntos y es algo que siempre he tenido presente, pero también dentro de mí la ilusión del cambio existía hasta que se apagó esa llama. Quizá no supiste darte cuenta de lo que te ofrezco, de lo que siento y de lo que significas para mi, quizá simplemente has igualado mis sentimientos a los de otras que no saben lo que es sentir de verdad... Y espero que no haya sido así, porque durante toda mi vida me ha costado que mis sentimientos hayan sido creídos y ya me empiezo a cansar. En estas lides soy sincera, pura, transparente, sin dobleces...no tengo más que lo que ves, pero entiendo que hoy por hoy sea difícil creer que alguien sea así sin esperar nada a cambio. 
A pesar de todo tomaré este bache como algo que me dará valor y fuerzas, que me hará un poco más madura y diferente, porque cada línea de meta es el comienzo de una nueva carrera. Nunca se sabe a dónde te puede llevar una decisión, ya sea tuya o de otros. Mientras más avanzo en este valle de lágrimas como diría mi abuela, más claro tengo el hecho de que las cosas no pasan porque sí o que es la suerte o esas cosas las que hacen que esto sea posible. Creo que tu destino te lo forjas tú y quien tú permitas que te ayude a hacerlo, también creo que todo lo que pasa es por algo y te llevará al futuro deseado más adelante. Puede que eso que tú crees lo mejor para ti no lo sea y simplemente te estés obcecando con algo imposible y no veas lo que tienes delante, la felicidad.
Todo son divagaciones y la única forma de saber cuán de importante es un cambio en tu vida o una persona es dejar que pase el tiempo, dejarse llevar lentamente por él y hacer balance al cabo de unos meses. Ahí te darás cuenta de que probablemente no era tanto como pensabas y hasta quizá te arrepientas de haber perdido ese tiempo maravilloso en algo pudiéndolo haber invertido en otras cosas mil veces mas enriquecedoras.
En unos meses volveré a hacer reflexión y espero haberme dado cuenta de que una amistad verdadera vale más que otras cosas sin identificar.





Mi problema es que siempre espero el tren pero cuando pasa ya no lo quiero coger y ni me lleva ni me deja de traer






La vida supera en imaginación a nuestros propios sueños

jueves, 30 de junio de 2011

Gracias León

Ha sido mucho tiempo, un curso entero, un embarazo si queréis jeje. Nueve meses de cambio en mi vida que le han dado un giro de 180º. Tiempo en el que he evolucionado, madurado y cambiado, creo que para mejor o para mucho mejor. Todo lo que me ha pasado lo guardo como experiencia y aprendizaje y serán cosas nuevas vividas que nunca olvidaré.
He aprendido a vivir en otras circunstancias, con nueva gente a la que no estaba acostumbrada más allá de los fines de semana y vacaciones y tras nueve meses he de decir que la convivencia ha sido increíble, he tenido la oportunidad de disfrutar un poco más de ti de lo que hacía antes.
Abrí las puertas de mi alma y de mi vida y por ellas ha salido gente, otra ha entrado y los que siempre están ahí se han mantenido en sus posiciones VIP. Compañeros de clase que me han aportado muchísimas cosas nuevas y que siempre llevaré conmigo y en especial a mis cuquis, únicas. Amigos que de nuevo reaparecieron en mi vida y han decidido quedarse para no volver a irse, cosa que agradeceré siempre porque el lugar que ocupan es demasiado importante. Nuevos amigos que no pensé llegaran al punto al que llegaron, hacerse indispensables desde cero. Viejos amigos que se tuvieron que ir y no por mi placer si no porque se empeñaron en hacerlo y que a día de hoy, doy gracias. Ellos que consiguieron que sintiera de nuevo mariposas y siempre recordaré. Él, que se fue y nunca volverá, gracias doy también...
En resumen, una autopista de gente en mi vida que sin pagar peaje han entrado o salido según han querido y que siempre agradeceré a los que se han quedado por aportarme algo bueno y a los que se han ido por librarme de ellos.
9 meses que no cambiaría por nada, 9 meses que espero repetir y mejorar el curso que viene, 9 meses que implican el comienzo de lo que me resta de vida, 9 meses que han hecho que hoy por hoy, yo sea como soy.






La ciudad se ilumina para nuevas proezas

Comer bien, dormir bien, ir donde se desea, permanecer donde interese, no quejarse nunca y, sobre todo, huir como de la peste de los principales monumentos de la ciudad

jueves, 19 de mayo de 2011

La historia la escriben los vencedores, contemos la nuestra

Porque ya hacía falta algo así, porque habéis despertado conciencias, porque conseguiréis algo importante, porque al menos lo intentáis...porque me habéis devuelto las ganas de luchar por un mundo mejor, por conseguir que algo cambie, por hacer que nuestra vida haya servido para algo más grande...



miércoles, 11 de mayo de 2011

Amigos...

¿Qué es la amistad si no algo que está en nuestra naturaleza que nos ayuda a continuar nuestro camino?
Necesitamos ser amigos porque somos sociables, cada día creamos nuevas relaciones intentando no quedarnos solos nunca. Poco a poco vamos cribando y nos vamos quedando con la gente más interesante y que mejor nos complementa.
Muchas veces elegimos y nos equivocamos y la persona que creíamos amiga resulta no serlo tanto. En este momento es preferible que te des cuenta porque la amistad no va a más que porque eso tan importante se ha visto traicionado por una mala acción.
La amistad muchas veces no se ve tan importante y se trata como algo meramente contextual, se llama amigo a cualquier conocido y se piensa que cualquiera se merece ese calificativo. Estamos en una sociedad en la que valores tan importantes no se toman como tales y luego todo termina de la peor manera posible.
La sociedad es muy egoísta, muchas veces esa persona que nosotros llamamos amigo equivocadamente solo nos quiere por interés y cuando todo se descubre nuestra alma queda herida. Son golpes que te curten en la experiencia, que te enseñan a ver más allá de una conversación, que te hacen más desconfiado y que te recuerdan que debes valorar lo que tienes.
Pero también sucede que entre muchas personas encuentras a esa gente que con el paso del tiempo compondrá tu vida y la hará mucho mejor. Es difícil encontrarlos, cuesta ver entre tanto carbón algún diamante, pero cuando emite su primer destello, sólo hay que dejarse llevar hacia él y no perderlo nunca de vista.
Y ya lo tienes entre tus manos, ya forma parte de tu vida y si lo cuidas bien, nunca se irá. Una amistad verdadera se forja no con el tiempo, si no con esa conexión especial que se siente entre dos personas que te provoca una confianza plena, un hablar y no parar, una compenetración única de las grandes amistades.
Un verdadero amigo siempre estará ahí, para lo bueno y para lo malo, para saber cuando estás mal aunque no lo digas y para sacarte una sonrisa por pocas ganas que tengas. Para salir de fiesta y bailar hasta el amanecer o para irte de cena y echarte unas risas. Para decirte si te estás equivocando o para aplaudirte cuando sea necesario… Están como parte de ti, como tu pepito grillo o como esa llama interna que nunca deja que se apague tu luz.
Como me dijo un gran amigo, se supone que los amigos estamos para todo esto, pero no todos lo hacen y los que sí lo hacen  hay que agradecérselo.
Y va siendo hora que os lo diga porque siempre estoy de broma e intentando sacaros una sonrisa pero también sé lo importantes que sois y lo difícil que a veces es mantener una amistad.

Mi culé, tú ya lo sabes todo porque no dejo de repetírtelo, porque gracias a ti sé lo que es la amistad y la nuestra será para siempre, prometido.

Mi medio neurona, mi rubi, que no hablamos mucho, pero eres esa amiga que por mucho tiempo que pase, te llamo y nos tiramos media hora hablando con nuestras tonterías, y con un te necesito, te tengo aquí siempre.
Mi medio wild, con un concepto tan puro de la amistad que das envidia, porque sabes demostrar quiénes son tus amigos y cuidarlos, porque a mí me cuidas y me apoyas y siempre nos reimos con el born to be wild, porque siempre te agradeceré que me quitaras esa venda, porque con ello me lo dijiste todo.

Mi mitocondria, que en poco tiempo me has llegado a lo más hondo de mi corazón y te vas a quedar en él para siempre porque nunca jamás te voy a dejar escapar. Eres esa amiga que aparece en tu juventud de la nada y se mantendrá por lo menos por lo menos hasta que hagamos 10000 días 10.

Mi coliflor (ya sé que la coliflor soy yo, pero es que me gusta J ), nos conocemos de toda la vida y por avatares de la vida un día nos montamos en el bus juntos y tras hora y media de charla afloró una amistad que desde aquella ha puesto la marcha directa y es imparable. Nuestras charlas, nuestras tonterías que son muchas, nuestros tés de hoy follo…Mil y una cosas que hacen que cada día seas más importante.
Mi Girl Secret For Party, que vives a unos kilómetros de mi casa y nunca nos habíamos llevado. Las vueltas de la vida nos han traído aquí y es ahora cuando pienso en porqué no nos hemos llevado desde antes, porque hemos perdido un valioso tiempo para fortalecer nuestra amistad. Pero seguro que tú estás de acuerdo conmigo en que tenemos todo el tiempo del mundo para seguir siendo únicas.

Mi bloggera prefe, que con nuestros comentarios en los blog nos decimos todo y luego estamos siempre con el: no es para tanto, gracias de verdad. Porque me encanta como escribes y me pongo tonta leyendo tus historias y siempre tienes palabras bonitas para lo que escribo, porque eres una persona muy interesante y quiero seguir descubriendo más de tu personalidad.

Mi Fucklove, difícil de llegar a ti, pero una amiga de las de verdad, tu amistad es muy importante para mí porque siempre tienes una visión completamente diferente a la mía y novedosa. Porque me dices las cosas como son y punto, y porque siempre pides mi opinión, importante para ti.

Mi Meris, con nuestras risas en clase y nuestras pinturas en las manos, nuestras charlas en AER y las carreras y broncas en cocina. Que me das un beso y me dices que me quieres cuando me contestas mal debido al agobio de Belens jejeje, pero que sabes que eres muy importante para mí y tu amistad la aprecio de verdad.

Mi exclusive´s, la amistad más reciente que tengo pero una de las que más rápido se ha forjado porque alguien así no se puede dejar escapar como amigo. Porque no cualquiera se merece una de mis tartas y porque siempre estás dispuesto a escucharme y a sacarme una sonrisa; y porque cuando tú estás mal, aceptas la ayuda y siempre acabas bromeando y demostrándome que por mucho que digas, algo optimista sí que eres.



martes, 10 de mayo de 2011

El amor y otras adicciones

Definitivamente a la gente le gusta sufrir. Nadie me puede negar que muchas veces sufrimos porque queremos, porque nos obcecamos con una idea y no sabemos superarla. Y otras veces sufrimos por la espera o porque no sabemos que nos depara el futuro.
Y luego está, obviamente, el momento en el que se deja de sufrir. Ese momento en el que se alinean todos los planetas del sistema solar y parte del extranjero y ocurre eso que pocas veces pasa en el que dos personas se enamoran. Aquí no existe sufrimiento, es todo bonito, perfecto y de color rosa. No vemos más allá y nos olvidamos de todo lo que hemos pasado para llegar hasta este ese punto porque merece la pena hacerlo.
Es fácil, tú decides si te sale rentable o no, sufrir o no sufrir…Pero claro, el problema es que esa parte del cuerpo que decide si alguien te gusta va a su rollo y da igual lo que tú quieras. Aquí subyace el problema, tú no quieres que pase, ya has sufrido mucho y te niegas a ti mismo el volver a pillarte por alguien. Pero otra vez los planetas se alinean y sí, has caído otra vez, te gusta alguien.
En este momento todo puede pasar… Depende de mil cuatrocientos treinta y siete factores, así como mínimo, y sucede algo. Aquí ya cada cual decide lo que hacer teniendo en cuenta que no sabe la reacción de la otra persona y que puede caer al vacío o subir al cielo de un solo viaje a 300 km/h.
Dicen que si te arriesgas eres un valiente, que haces lo que tu corazón te dicta y que por ello mereces un respeto… Y es verdad, tienen su parte de razón, pero para mí también eres algo suicida, no sabes que hay al otro lado de la pared, si lograrás atravesarla o no y si ese golpe te puede hundir demasiado.
Un sentimiento tan bonito y que puede doler tanto será porque de verdad es importante y merece la pena sentirlo alguna vez. Y quizá también por ello compensa sufrir alguna que otra vez para descubrir lo que se esconde detrás de esas mariposas…

























Amor es un fuego escondido, una agradable llaga, un sabroso veneno, una dulce amargura,
 una deleitable dolencia, un alegre tormento, una fiera herida, una blanda muerte

martes, 3 de mayo de 2011

El poder de una sonrisa

Hay cosas que tan asumidas las tienes que de un día para otro las olvidas. Son algo tan normal en tu vida que desaparecen y no las echas de menos. Todo continúa igual, el tiempo pasa y tú no notas nada diferente hasta que alguien te dice: eh tú, para y obsérvate. Entonces sí, caes en la cuenta que algo falta, que no es lo mismo y que todo tiene un porqué.
Lo que te identifica, una de tus principales características la dejas abandonada en un cajón sin si quiera darle una explicación, simplemente porque hay cosas que no te hacen sonreír 24 horas al día y te hacen darle vueltas a la cabeza sobre si sucedieran. Pero lo que no piensas es que por eso que sería tan bonito estás dejando pasar muchas cosas. Es lógico que lo pases mal, que te sientas triste, abatida...pero eso no puede ser todo. La vida sigue y tú sigues en ella, y como no se va a parar a esperar que tu cabecita se aclare, lo lógico es que no abandones nunca lo que eres, porque esa es la clave del éxito. Ser uno mismo es el centro de una vida fructífera, feliz y plena.
Olvidé lo que era, lo que se sentía y lo que se ganaba...Pero hoy lo recordé. Y hoy volví a descubrir el poder de una sonrisa, el poder de mi sonrisa. Y me he prometido no olvidarlo, luchar por lo que quiero y ser yo, independiente y única.



La sonrisa es una verdadera fuerza vital, la única capaz de mover lo inconmovible.


She was a fast machine 
She kept her motor clean 
She was the best damn woman I had ever seen
She had the sightless eyes 

lunes, 25 de abril de 2011

Otro día más...

Un torbellino de emociones es poco, un huracán se queda corto...Siento tantas cosas por segundo que mi corazón se desborda por momentos y siento la necesidad de llorar a veces y de reir en otras. Y el problema es que no sé que hacer con tanto sentimiento...Callármelo ya fue imposible y supongo que por simple supervivencia intenté negarme las cosas y pensar que simplemente eran producto de mi imaginación. Durante unos días algunos pensamientos parecían alejarse de mi y difuminarse en el aire con la misma rapidez que llegaron. Pero como siempre suele suceder en mi vida, un día llegó un vendaval que tiró por tierra esa torre que yo me había creado y creído. En ese día el latido inconfundible de mi corazón cuando me pasan estas cosas volvió a latir con más fuerza y esas dichosas mariposas que habían dejado de batir sus alas volvieron a despertar en mi interior. Puede que a este paso llegue a odiar las mariposas por recordarme cada vez que vuelves a mis pensamientos lo que siento.
Bien, llegados a este punto sólo intento saber cómo poder resolver estos conflictos internos que cada día me hacen sentirme eufórica y desdichada, feliz y triste, contenta y aburrida...Y ya no sé si lo conseguiré escribiendo porque parece que me lío más que me aclaro.
Empiezo a tener claro que estas cosas no están hechas para mí en tanto que ya me canso de lo que duelen y me gustaría poder evitarlas pero parece imposible.
Pero luego pasa que te vuelves a aparecer y claro, las cosas cambian y mi sonrisa sigue puesta sin dolores ni tristezas. Con tu forma de ser haces que todo parezca mucho menos de lo que es y que por un momento las nubes se vayan y deje de llover. Y aunque haya ratos que sienta rabia, incomprensión, algo que quiero que sea odio para que borre todo esto, tristeza; no puedo aguantarme y dejo que esas mariposas dibujen otra vez mi sonrisa.
Y entonces, después de todo, de darle dos mil quinientas diecisiete vueltas a la cabeza llego a la conclusión que es inevitable, que por mucho que lo intente el estar mal no se va a ir, pero esa sensación de estar en las nubes tampoco, que son sentimientos que se acompañan el uno al otro...Por lo tanto he decidido convivir con ello, disfrutar de los momentos de euforia y olvidarme por completo de los malos, ahogarlos y hacer como si no existieran porque no merece la pena sufrir y menos si es por esto.





Ya lo sé, soy idiota.
No deberian importarme tantas cosas
que calientan mi cabeza.

domingo, 10 de abril de 2011

Ambiciosamente loca...

Pronto, lo sé. Precipitado, puede ser. Sin base lógica, también. Intuitivo, seguro. Poco inteligente, quizá. Con toda la ilusión, puedes estar seguro.
En la vida a veces conoces a gente que en principio no significa nada, lo ves como un puro trámite y no le das importancia porque no sabes lo que puede llegar a significar. En ese momento en tu vida hay cosas que tú misma piensas que son más importantes y por ello cierras puertas sin saber muy bien lo que hay detrás de ellas.
Dicen que cuando Dios cierra una puerta abre una ventana y puede ser verdad sólo si cambias eso de Dios por algo como la suerte o el destino. Y mi suerte o mi destino decidió que mis ojos debían asomarse por una ventanita, pequeña al principio, que tenía vistas a una personalidad tan diferente a las que siempre conocí que me obligó a conocerla.
Conocí a un chico inteligente, simpático, amable, sincero, encantador, loco, raro en el buen sentido de la palabra, irónico, gracioso, amigo de sus amigos; un chico diferente al resto, de esos que dicen no quedar...
Te conocí a tí y todo empezó a cambiar. Yo no me daba cuenta pero día a día hablábamos y te ibas adentrando en mi vida de una forma increíble.
Horas y horas hablando, riendo hicieron y hacen que no pueda negarme a mí misma todo esto; que aunque trate de no pensarlo me puedan mis sentimientos y haya días que se me haga imposible negar lo evidente.
No se en que momento pasó o porqué fue, si por las vueltas al mundo o por todas las sonrisas que me has regalado, pero sé que esto ya no es un mero trámite. Y también sé que me has ofrecido una de las mejores amistades que he tenido y que tengo y que por ello, no la quiero perder, aunque tenga que callarme lo que estoy sintiendo.
Callarse a veces es lo correcto, porque no es el momento o porque quizá sea la situación que menos problemas provoque pero yo no quiero hacerlo y menos contigo. Siento la necesidad de decirte que me has vuelto hacer sonreir sin más, porque mi cuerpo tiene ganas, que por las mañanas me levante de mejor humor sólo porque me acosté pensando en las mil y una tonterías de la noche anterior.
Me gusta sentir esta ilusión e imaginar que algún día cambie de escenario, de mi mente a la realidad, que lo que pienso pueda tener lugar alguna vez, que tú puedas quizá sentir algo parecido...Y también me gusta que sólo seas mi amigo, porque sé que estás ahí y sabes que siempre estaré aquí para lo que necesites; y que no sepas nada de todo esto porque quizá las cosas cambien.
Pero odio soñar contigo, querer decirte que me encantas, pensar en tí cada día más y no poder decírtelo.
Entonces es cuando me armo de valor y en un arranque de ambición me subo al cielo y veo desde aquí todo de otra forma y veo posibles cosas que habitualmente las veo inalcanzables, como estrellas.
Y aquí estoy...desde el cielo, llevando a cabo mi apuesta inteligente diciéndote que sólo me gustas un 40%.




Todo lo que una persona puede imaginar, otras podrán hacerlo realidad
Julio Verne

sábado, 2 de abril de 2011

Montañas rusas

Y la vida es eso, una montaña rusa. Unos días subes, otros bajas y en otros te mareas tanto que no sabes ni dónde estás.
Arriba, abajo, tantos cambios te descolocan y te descentran...Ahora sí, arriba, vistas increíbles, mariposas en el estómago, ganas de gritar y dolor en la cara de tanto sonreir, no hay tristeza en el mundo, sólo tú feliz.
Un instante después, ahí abajo se convierte en aquí. Oscuro, profundo, frío y hasta húmedo, vacío, solo, tan solo que podría gritar a los 4 vientos mis rabias y nadie me oiría.
Lo más interesante de esta montaña rusa es que esa zona alta e increíble podría perfectamente darse lugar en una noche oscura, fría y húmeda y la zona baja estaría perfectamente ubicada en una tarde soleada, calurosa, con sonrisas alrededor pero no en ti...
Aquí abajo no hay nada, solo oscuridad y soledad, rodeada de gente solo quiero quedarme sola, aislarme y hablar con mi gente. Aquí se ve tan clara la hipocresía, la falsedad, las relaciones interesadas, los problemas, las malas contestaciones...Necesito unas gafas para estar aquí, es tanta la claridad que desprenden todas las cosas malas que mis ojos empiezan a doler y a llorar, aunque no sé si mis lágrimas son por la claridad o por otra cosa.
Odio estar aquí, también entiendo que hay días así, pero es tal la impotencia que siento al ver como los minutos pasan y el pesimismo se adentra más en mi...Odio no poder parar de llorar en silencio, nadie me entendería y además la gente está tan inmersa en sus vidas que podría gritar y harían como si nada por continuar con su vida y no perder el tiempo.
Odio escuchar y no sentirme escuchada...Odio querer gritar y no poder..Odio no saber si ha pasado algo..Odio no ser más feliz..



martes, 29 de marzo de 2011

El fútbol, modo de vida

La vida es como un partido de fútbol. Cuando eres pequeño juegas en los infantiles, alevines y cadetes pero sin presión porque sabes que no es algo importante, que siempre estará tu madre para solucionarlo y que juegas por divertirte y pasártelo bien. Todos somos amigos en el campo de juego y al terminar el partido, las faltas, empujones, goles y pérdidas se olvidan y no existe la competitividad negativa. Te vas con el balón a casa y lo único que quieres es tener a tu padre 5 minutos enseñándote no se qué regate que viste en el partido del domingo.
Pero los años pasan y esas categorías se quedan pequeñas y te exigen ascender. Empiezas a jugar ligas, y a cambiar de categoría. Parece mentira pero toda aquella ilusión con la que jugabas siendo pequeño se ha ido convirtiendo en ambición por seguir hacia arriba y te vas definiendo en tu posición en el campo. 
Y es aquí donde decides tu posición ante la vida, si te defiendes, si avanzas por el lateral sigilosamente, si atacas o si controlas el juego desde el centro; posicionándote así para toda tu vida. Si por un casual decidieras cambiarla, porque no te conviene, porque no te gusta, porque no te encuentras cómodo y simplemente porque tienes ganas de ser diferente la vida no te lo pondrá fácil. Descenderás de categoría por ser el raro, el diferente que no se conforma con lo que tiene.
Pero aún queda lo mejor por llegar, la primera división. Has subido hasta lo más alto, ahora sólo queda mantenerse allí y tratar de ganar todo y a todos. Vendrán partidos fáciles con los colistas pero que siempre te pueden crear un problema, partidos con los grandes de la liga que te harán creer en cosas imposibles y partidos con iguales que serán los que decidan la liga.
Y aquí es donde yo me encuentro, en mi primera división pero sin posición definida en el campo. Hay días que soy un lateral, hago las cosas sin que se noten para al final, salir a la luz y descubrirme. Otros días me adelanto y decido iniciar un ataque definido, rápido y vertical y así termino con alguna duda que haya por mi mente. También sé controlar el juego desde el centro, mover fichas y aconsejar al resto de jugadores de mi partido, intentando que la jugada que cree sea maestra y perfecta.
Pero últimamente defiendo, defiendo mi posición de ataques y daños, de nuevos golpes que recuerdan a anteriores... Y quizá sea miedo de sufrir, de volver a caer en el césped y no saber si seré capaz a levantarme. O quizá miedo a adentrarme en la delantera del equipo de mi vida y ver que uno de los jugadores se ha convertido en algo demasiado importante en mi equipo.



Llegas aquí para brillar, lo tienes todo



Me muero por explicarte, lo que pasa por mi mente... 
Y decirte  el porqué de mis miedos,
el motivo de mis sonrisas
y la causa de mi ilusión


lunes, 21 de marzo de 2011

Primavera! :D

La primavera ha llegado y todo pinta diferente. Los colores parecen más intensos, el azul del cielo es aún más cristalino, la sonrisa de la gente es casi espontánea (siempre hay alguien que se reprime, pero allá ellos), el mal humor se comienza a desterrar y la felicidad da la sensación de que ocupa un poco más nuestras vidas.
Tumbarme hoy en césped verde, tan verde que hacía daño a la vista toda esa exuberante clorofila en pleno apogeo, fue una sensación que ya tenía olvidada... Y es que día tras día de este invierno frío y largo que me tocó vivir, la fortaleza y la vitalidad del verano se iban escapando por cada poro de mi piel hasta llegar a un punto en el que mi cerebro, mi epidermis, mis pulmones, mis ojos y mi boca me pedían aire nuevo, limpio y fresco.
Poco a poco ese oxígeno va llenando mis pulmones y penetrando en mis venas, llegando hasta el último rincón de mi cuerpo y renovándolo. Siento la energía subir, cargar mi cerebro y mis ganas de vivir y me veo capaz de todo.
La noche llegó y el primer día de la primavera toca a su fin, pero ya no es como hace semanas...Antes, terminaba el día y al despertar ni mirabas por la ventana por no ver qué desapacible estaba el tiempo. Ahora no, ahora todo es diferente, ahora abres la ventana y hueles, y te sorprendes a ti mismo recordando todos esos olores. Flores, pájaros, colores, aire, calor...Todo, todo hace diferente cada día, todo hace más apetecible salir y correr a través de una pradera, todo cambia tu cara y la convierte en una sonrisa.
Y un día como hoy puede marcar un antes y un después en un año, puede cambiar la forma de pensar, puede hacer que de repente te atrevas a comerte el mundo de verdad, que no dejes pasar oportunidades y que seas tú quien maneje el volante de tu vida.
Y yo quiero ese antes y ese después, quiero cambiar, mejorar, demostrarle al mundo lo que hay detrás de mi sonrisa permanente, quiero dejar huella en las vidas de la gente, quiero...VIVIR.







Sigue huyendo, ve donde te apetezca. Los sueños no tienen limitaciones. El espíritu se libera del yugo del cuerpo y se regozija en una libertad ilimitada. Yo me he ganado esa libertad, ¡yo también seré un ser libre!
El resto del sueño, acaba de empezar...




















Es importante perder la razón imprescindible que sea en tu cuarto

miércoles, 9 de marzo de 2011

Carnaval, carnaval...

Días de cambio, de ser otra persona, de disfrazarse y no dejarse ver...Días de metamorfosis y de desinhibición...
Hace tiempo que no actualizo, quizá porque mi vida avanza tan rápido que no me da tiempo a pararla, se me escapa el tiempo entre las manos y los días avanzan vertiginósamente...
Pero hoy he tenido tiempo para escribir, para reorganizar todas esas ideas que se me vienen a la cabeza y que no consigo ordenar en mi pensamiento.
La vida avanza, cambia y tú estas en ella sin saber muy bien hacia dónde tirar, pero siempre hay alguien que te dice: eh tú, quieto ahí, frena y observa lo que hay a tu alrededor y aprovéchalo!
Y así te centras y pisas el freno y observas que el mundo no es tan malo, que las cosas van y vienen, buenas y malas pero que la suerte siempre las cambia.


No sé que pensar, será, no será, es así o del revés... Hay tantas cosas que te lian y que no sabes de donde vienen que te odias a ti misma por no confiar un poquitito más en ti, en creer en tus posibilidades y dejar que fantasmas del pasado hagan sombras en tu vida llena de luz.
Días como hoy hay cosas que te hacen caer, arrodillarte de nuevo y piensas que no vas a poder volver a subir, otra vez más ya no; pero encuentras fuerzas donde no sabías que las tenías, en el fondo de tu alma, allí donde sólo llegan los amigos verdaderos, la gente de verdad, la que importa...No sé muy bien si salí hacia arriba yo sola o fue su fuerza desde la distancia, sus llamadas o sus risas, sus recuerdos o sus tonterias; el caso es que lo hice y aquí estoy ahora con una sonrisa de oreja a oreja. Porque en la vida, no se puede perder el tiempo llorando o pasándolo mal, hay que coger el toro por los cuernos y tirar p'alante y no dejarse comer por una sucesión de días que es lo que en el fondo es la vida, día tras día.
Y lo más probable es que en la mayoría de dichos días, haya que hacer como en carnaval, ponerse la careta y  no permitir que el mundo te pase por encima, porque no se merece ese gusto.


Pero también quizá seáis vosotros, mi culé o mi medio wild, que hoy sea día mitocondrial, que haya hablado con vosotros por teléfono o quizá seas tú...O tal vez simplemente esta ilusión que sé que acabará en nada, pero me hace sentir viva...

viernes, 18 de febrero de 2011

Hoy me pudo el mal humor, me ha ganado la partida...

Estoy cansada, cansada de sufrir, de llorar, de borrar la sonrisa de mi cara, de intentarlo todo y no conseguir nada a cambio, de querer hacer las cosas bien y que sólo salgan mal.
Harta de ver como este mundo no cambia, de que la gente sea mala, de que las cosas no mejoren, de la falsedad y del odio.
Y tan harta estoy que a pesar de la oscuridad, de la necedad y el pesimismo, hay un rallito de sol que se va abriendo paso...
Es un rallito por cada uno de vosotros, por cada sonrisa que sois capaces de sacarme, porque estais ahí aunque no os vea y os necesito para darme cuenta que este mundo no es tan cabrón, que alguien merece la pena.
Simplemente GRACIAS porque en dias como hoy, sois los responsables de que mis lágrimas cesen cuando empiezan a caer.

sábado, 22 de enero de 2011

¿Sociedad? Mi gente, esa es mi sociedad!

¿Qué pasa si el mundo se va a paseo? ¿Si la gente desaparece por un momento de nuestras vidas? ¿Si solo nos importara ser felices?
Yo lo diré: que empezaríamos a vivir nuestras vidas y no a preocuparnos por las que el resto piensan que tenemos, que cumpliríamos nuestras metas, esas que desde pequeños queremos conseguir, que haríamos las cosas sin pensar en el qué dirán y que solo nos preocuparíamos de la gente que merece la pena.
El mundo nos afecta y nos condiciona, somos animales sociales por naturaleza...y esa afirmación es genial, perfecta y muy optimista...eso sí, siempre y cuando la sociedad quiera para tí el bien. El problema es que hoy por hoy, la sociedad que tenemos se preocupa simplemente por cada uno y si puede pisarte para resurgir esa persona, lo va a hacer, no cabe duda. Hemos creado una sociedad individualizada, sin preocupaciones por el resto y seguimos sin cambiarlo, nos quejamos, sabemos lo qué pasa pero nadie hace nada por cambiarlo.
Y yo hoy quiero reflexionar sobre qué pasaría si yo no quisiera saber nada de las opiniones del resto, si me interesara por mi gente, esa que me lo ha demostrado todo...Sería la rara, la pasota y la que va en contra del resto... ¿Y? Volveríamos a lo mismo, lo que la gente piensa de mí, pero si yo soy feliz, pueden pensar lo que quieran, hablar lo que prefieran e inventar lo que más rabia les dé, porque yo me iré a la cama sonriendo, dormiré tranquila y realmente comenzare a ser yo.
Puede que sea una utopía y que todos nos sigamos dejando llevar por esta sociedad y por la clase de personas que hay hoy en día, pero no voy a ser yo la que no lo intente